jueves, 29 de noviembre de 2007

LOS ´8O EN LOS OJOS DE LA AFI

En junio de 1981, un grupo de fotógrafos se reúne, todos con la inquietud buscar espacios para la libertad de expresión ante la opresión que se vivía. Así surge la AFI: Asociación de Fotográfos independientes. Ellos se encargaron de documentar un pasado que aún no olvida sus secuelas.



En su formación convergieron varios grupos de distintos intereses fotográficos, por ejemplo Paz Errazurriz, Leonor Vicuña y Juan Domingo Martello que eran del estilo plástico y artístico, otros más ligados a la fotografía de prensa como José M

oreno, Ricardo Astorga y Luis Navarro.

La idea era aglutinar y respaldar a numerosos fotógrafos denunciantes contra el gobierno y que se encontraban desamparados al no poder formar parte de la Unión de Reporteros Gráficos.

Lo que en definitiva gatilla la creación de la AFI como tal, es la censura que sufrió la fotógrafa Paz Errazurriz al exponer una muestra de desnudos masculinos en los Salones de Verano del Museo de Bellas Artes.

Desde entonces, el movimiento empieza a tomar forma, los fotógrafos unen sus criterios para exponer el otro lado de la dictadura y crear una instancia de expresión y reflexión con el ejercicio de una disciplina de calidad, comprometida con la realidad social y política del país. Trabajaban en medios alternativos de prensa de la época, como las revistas Apsi, Analisis o LA Bicicleta, o como corresponsales de agencias internacionales.


En 1981, la incipiente organización, edita el Primer Anuario de Fotografía y al año siguiente el segundo, pero en aquellas fotografías no había manifestaciones políticas, porque no había una instancia que los respaldara.

En una entrevista realizada por Marcelo Ibáñez en el 2002 a Jose Moreno, uno de los socios fundadores de la AFI, éste recuerda:

"El 82 sacamos una publicación de libre distribución que se llamó Puntos de Vista. Ahí publicamos un artículo que se llamaba Fotografía y Seguridad Nacional, a propósito de las detenciones de fotógrafos y las limitaciones que nosotros teníamos para salir a la calle, donde éramos permanentemente seguidos y detenidos. Al día siguiente estaba la CNI en el departamento de Jorge Ianisewsky diciéndonos que si no teníamos autorización de la Dinacos no podíamos seguirla publicando. Con esa publicación llegamos hasta el número 10 que salió en 1990. Nunca teníamos plata, siempre teníamos que andar buscando recursos y haciendo ediciones casi clandestinas. Jorge debía cambiarse permanentemente de departamento porque cada cierto tiempo lo volvían a visitar. Nuestras reuniones eran clandestinas, nos juntábamos en distintos lugares. En el tiempo que la Leonora Vicuña se incorporó, nos juntábamos en un club de filosofía hermética que ella arrendaba en su casa, ahí pasábamos piola. También nos juntábamos mucho en el Archivo Fotográfico de la U. de Chile".


__________________________________________

Bbibliografía

- Los ojos de la Afi, con el olvido en la mira, Marcelo Ibañez , agencia txt
- Cristián Andrés Labarca Bravo, “Fotografía periodística chilena, los fotógrafos enjuician a los medios”, memoria para optar al título de periodista, USACH, Escuela de Periodismo, 1998

martes, 27 de noviembre de 2007

EL FOTOPERIODISMO EN CHILE

La fotografía en el periodismo, es sin duda la más conocida por todos porque es ampliamente utilizada por los medios. Pero hoy tenemos una deuda con la valoración y el reconocimiento de autor de las imágenes.


Sin duda el genero fotográfico que mas se ha desarrollado en Chile es la fotografía periodística. Por la cercanía con la gente y la masividad de los medios, este estilo de fotografía ha estado presente por más de un siglo en la sociedad chilena. Pero es muy poco lo que se ha escrito al respecto, y la valoración que existe hacia los fotógrafos.

En los inicios del siglo XX, se crean los primeros fotoclubes, formado por un selecto grupo de fotógrafos aficionados que se destacan en la vida intelectual del país. Ellos publicacaban sus trabajos en las cuatro grandes empresas periodísticas existentes: Zig-Zag, El Mercurio, La Nación y el Diario Ilustrado. A pesar de que el ilustrar el acontecer político comienza a ser muy frecuente en el trabajo reporteril, en las primeras publicaciones los reporteros gráficos eran escasamente mencionados y en las imágenes no se señalaba el autor.





De este periodo, surge la figura de un reportero legendario, Roberto Aspeé. Como fotografo de Zig-Zag, se comprometió con el trabajo de documentar grandes sucesos para las generaciones futuras. Entre su notable material, se encuentra el cambio de mando de los presidentes Errazuriz y Riesco, el terremoto de 1906, las fiestas del centenario de la Independencia de Chile y los funerales de Manuel Montt. La gran parte de este registro de inmenso valor histórico, hoy no existe, dando cuenta de la ignorancia o poca valoración que se le ha atribuido a la fotografía. El archivo de Roberto Aspeé, fue destruido en un traslado de ubicación de la empresa Zig-Zag, y lo que se logró salvar de aquello, terminaron siendo vulgarmente vendidas.




Sin embargo, se le concede, por primera vez a un reportero gráfico, el Premio Nacional de Periodismo en 1954. Aspeé, será el decano de los fundadores de la “Unión de Reporteros Gráficos” en 1938, una asociación de fotógrafos incentivados por generar una protección gremial a la profesión. Cabe considerar que este gremio se encuentra vigente hasta hoy.



EL ROSTRO DE CHILE

“El Rostro de Chile”, es un trabajo documental que implicó todo un año de viajar por Chile y plasmarlo en fotografías. El mentor del proyecto fue Antonio Quintana, quien en 1959 lo presentó al secretario General de Chile, Alvaro Bunster quien lo acoge y delega un equipo de fotógrafos para coordinar la exposición. Entre los fotógrafos que se encargaron de esta ardua labor estaban, además de Quintana, Roberto Montandón, Domingo Ulloa, Mario Guillard y Fernando Ballet. Finalmente, recopilaron más de siete mil imágenes, de las cuales 410 integraron definitivamente la muestra. La exposición se inauguró en 1960, con motivo de la conmemoración de los 150 años de la Independencia de Chile. Las imágenes son una muestra de la hetereogenidad de nuestro país a través de las distintas miradas de los fotógrafos, quienes conformaron un equipo coherente con la elección del encuadre, la iluminación y el uso de la nitidez fotográfica. La casa Central de la Universidad de Chile, fue la primera en montar la exposición, desde allí, la obra recorrió todo el país, luego viajó a gran parte de Latinoamérica, Estados Unidos, la Ex Unión Soviética y prácticamente toda Europa, para finalizar en Osaka, Japón.

________________
Bibli0ografía



jueves, 15 de noviembre de 2007

GRANDES MAESTROS DE LA FOTOGRAFÍA DOCUMENTAL

En una época que demanda cambios políticos y sociales, sobresalen tres chilenos

que se dedican a inmortalizar con sus lentes la agitada realidad de mediados del siglo XX. Hoy Chile tiene una deuda eterna con ellos y sus obras que exigen reconocimiento.

Ellos son: Antonio Quintana, Marcos Chamudes y Sergio Larraín.



ANTONIO QUINTANA (1905- 1972)

Un maestro de la fotografía documental. Aunque, para muchos, su figura es desconocida, Quintana es un antecedente de los que será la fotografía de prensa en las décadas siguientes.

En la década del ´40, crea la primera escuela profesional de fotografía, bajo el alero de la Escuela Nacional de Artes Gráficas (ENAG).

Abarcó diversos géneros de la fotografía como la arquitectura, el paisaje y los retratos. Su obra estaba cargada de compromiso social, lo que lo define como el iniciador de la fotografía como documento social en Chile.

Fue miembro hasta la muerte del partido comunista, y en 1948, bajo el gobierno de Gabriel González Videla, debe abandonar el país por sus ideas políticas.

Es reconocido principalmente por “El rostro de Chile”, la más importante colección colectiva de fotógrafos nacionales, que difunde en el mundo entero nuestro paisaje y sociedad.

El proyecto implicó tres años de recorrer Chile, las variedades del paisaje, actividad económica historia, tradición y cultura, fueron plasmadas en más de mil fotografías, cuatrocientas de ellas formaron parte de la exposición. “El rostro de Chile” es presentado en gran parte de Latinoamérica, en Estados Unidos, Europa, para finalizar en Japón.

Amigo de Diego Rivera, David Alfaro Sequeiros y Pablo Neruda, Quintana señalaba que: “la fotografía es forzosamente y ante todo un documento. Pero la realidad de la que parte debe ser interpretada para no repetir pasivamente lo que ya está, sino convertirla en expresión comunicativa. Superar el documento sin escamotearlo.”

Nuestro país, que acostumbra a reconocer la labor de sus artistas una vez muerto, olvidó a este fotógrafo, pero su estilo trasciende hasta nuestros días marcando la fotografía de prensa.

MARCOS CHAMUDES (1907-1989)

Marcos Chamudes Reitich, periodista que nace en santiago en 1907. Militante del partido comunista, llega a ser diputado en el gobierno de Pedro Aguirre Cerda, pero es expulsado por confusas razones y parte a Estados Unidos. En ese país tan distinto a sus ideales, descubre la fotografía e ingresa a la escuela de Fotografía Moderna.

En Nueva York, entra en contacto con movimientos vanguardias y comienza a retratar personajes importantes por lo que se hace cono cocido en la esfera local

En plena Segunda Guerra Mundial, se enrola en el ejército norteamericano, donde trabajó documentando algunas campañas militares.

El trabajo documental es un eje central en la producción de Chamudes. Acabado el trabajo en el ejército, fotografía la dramática realidad de los refugiados de la postguerra, es contratado por la Organización Internacional de Refugiados, institución que lo lleva a diversos lugares del mundo.

La fotográfa de Karen Berestovoy, , realiza en el 2000, una exhaustiva investigación sobre este gran maestro. Al respecto señala: “Chamudes fue una persona con conciencia histórica; sus imágenes son sueños, son momentos de la vida transportados al lenguaje fotográfico. La presencia explícita y retórica del hombre denota su obsesión por definir qué lugar ocupa éste en el mundo, tema que también le preocupó desde su vivencia personal.”


SERGIO LARRAÍN ECHENIQUE (1931 - 2007...)

Sergio Larraín Echenique nace en Santiago en 1931. Realiza sus primeras fotografías a los 18 años, retratando a los niños que habitan bajo los puentes del río Mapocho. Tres años más tarde, parte a estudia r a la Universidad de Berkeley, en California y viaja por Europa y el Oriente.

En 1959, en París, obtiene la representación para Chile de la agencia Mágnum, convirtiendose en el único chileno que ha ingresado a tan prestigiosa agencia.

Impulsor del modernismo y fundador del Museo Chileno de Arte Precolombino, sus obras impresionan por su calidad, sensibilidad y vangu

ardismo, como la foto de las niñas bajando por la escalera, la que el propio artista define como “la primera fotografía mágica nunca antes presentada”.

Entre los años 1950 y ´60, publica en famosas revistas ilustradas tales como LIFE.

Publicó varios libros de fotografía, dos de los cuales con la coautoría de Neruda: “Valparaíso” (1965) y “Una casa en la arena” (1966). Lamentablemente, estas obras pertenecen al archivo de la agencia Mágnum y aún no han sido expuestas en Chile, por lo que su obra ha tenido poco en impacto en los fotógrafos chilenos posteriores al golpe de Estado.

En los ’70, ingresa al movimiento esotérico Aric

a, razón por la cual se aleja del mundo civilizado para la búsqueda espiritual mediante el yoga y la meditación. Hoy es un verdadero mito viviente, ya que algunos aseguran que vive en Francia, y otros que está en Chile, meditando en el Valle del Elqui. Lo cierto es que se lamenta no poder acceder a su obra completa, o saber las razones que lo motivaron a alejarse de la fotografía, después de alcanzar gran fama internacional.

___________________________

Bibliografía

- José Pablo Concha Lagos, “Más allá del referente, fotografía”, Colecciones Aisthesis “30 años” Nº 3, 2004

- Luis Alberto Olguín Orellana, “la fotografía en Chile, retrospectiva y análisis publicitario”, Tesis Universidad de Stgo. de Chile, Escuela Tecnología, Depto. De Tecnologías Generales, 1993

- Cristián Andrés Labarca Bravo, “Fotografía periodística chilena, los fotógrafos enjuician a los medios”, memoria para optar al título de periodista, USACH, Escuela de Periodismo, 1998

- Gonzalo Leiva Quijada, “Álvaro Hoppe, El ojo en la historia”, Colección Imaginarios, 2003

- MemoriaChilena.cl

- Nuestro.cl

INICIOS DE LA FOTGRAFÍA EN CHILE

No existen registros claros sobre la llegada de la fotografía a nuestro país. Muchos de los datos que conocemos se basan en especulaciones a veces contradictorias.

Sin embargo, este arte se fue arraigando a nuestra cultura y sociedad ayudando a forjar nuestra identidad nacional.

El daguerrotipo y su introducción al país

El daguerrotipo se lanza a luz pública en 1839, en la real Academia de París. Fue inventado por el francés Joseph Nicéphore Nièpce y dado a conocer por Louis Jacques Mandè Daguerre, de ahí que deriva su nombre.

El invento causó inmediata histeria colectiva ante la posibilidad de ser inmortalizado.

Llega a América a bordo de la fragata francesa “La Orientale”, un buque escuela que, luego de pasearse por Brasil y Montevideo, arriba en Valparaíso, el 28 de Mayo de 1840.

Su exhibición acaparó a atención de los periódicos. El Mercurio de Valparaíso publicó una descripción y los meritos del invento. Del periódico de la época de extrae: «…Ha sido preciso verlo con nuestros propios ojos para poder hacerse una idea de la rapidez y del resultado de la operación. En menos de nueve minutos el llamado Chafariz do Largo do Pazo (Fuerte de la Plaza de Palacio) ; el mercado de los peces; el Monasterio de San Benito; y de todos los otros objetos circundantes se hallaron reproducidos con tal fidelidad, precisión y minuciosidad que se veía bien que la cosa había sido hecha por la mano de la naturaleza, y casi sin intervención del artista. Es inútil encarecer la importancia del descubrimiento», que refleja el impacto que generaba el daguerrotipo en todos los países del mundo.

A bordo de la expedición, se encontraba el abate Comte, un físico francés que según decían, había trabajado con el mismo Daguerre. Comte se encargaba de enseñar la utilización del invento en cada país americano que el buque escuela recalaba.

El próximo destino para la fragata era Perú. Pero la expedición naufraga a la salida de Valparaíso, hundiendo con ello alguna imagen que pudo ser captada con esa cámara. Esto originó especulaciones en la real llegada del abate Comte a Chile, algunos dicen que permaneció en Montevideo por motivos de salud.

De todas formas, el daguerrotipo alcanzó rápidamente la fama en todo el territorio nacional y pronto empezaron a surgir profesionales del retrato. Aunque en un principio, sólo elite burguesa podía costear las ansias de representación, poco a poco el retrato se fue democratizando.

Algunos personajes destacados

El norteamericano Eduardo Spencer se encarga de fotografías las campañas del ejercito chileno en la Guerra del Pacifico entre 1879 y 1882. diez años más tarde, Emilio Hagnauer, registra en a891 la batalla de los campos de Placilla, cubiertos con tres mil cadáveres de leales y opositores al presidente José Manuel Balmaceda, quien se suicida a los pocos días.

Williams Letts Oliver, a partir de 1860 comenzó a registrar Chile. Su obra más impresionante es el bombardeo de Valparaíso por la Escuadra Española. Durante tres horas de sistemático bombardeo el 31 de Marzo de 1866, Oliver captó con su lente como los incendios arrasaban con valiosas propiedades proyectando impresionantes columnas de humo.


Primeros estudios fotográficos

En 1858, llega a nuestro país la familia Helsby quienes dan auge al aprovechamiento artístico y cultural del daguerrotipo. Se dice que Thomas Colon fue el primero en ejercer la daguerrotipia en América, instalando un estudio en Buenos Aires. Siete años después se traslada a Valparaíso donde fundó Helby´s Corner en la calle Aduana 111, que se convierte en el establecimiento más prestigioso del puerto. Realizaba todo tipo de retratos, difundiendo la moda de las fotografías en las altas clases sociales.

Sus hermanos Guillermo Jorge y Juan sucesivamente se establecieron en Valparaíso, pronto se formo cierta independencia que le dio primacía a la profesión.

El primer daguerreotipista establecido en Santiago fue el francés J.P Davette, quien decía se dedicada a los más difícil del arte y ofrecía retratos de gran perfección.

De 1845 a 1849 se extienden los máximos años de aguda competencia entre daguerreotipistas. Desfilaban por Sudamerica artistas ocasionales que aportaba sus conocimientos a los fotógrafos más antiguos a veces cedían sus derechos.

La firma norteamericana de R.H. Vance, se instala en Valparaíso amenazando la popularidad de los Helsby. Durante cinco años se especializaron en piezas de daguerrotipo en miniatura que avisaban en los periódicos.

Dos años después, decide rematar la firma, ocasión que fue aprovechada por la familia Helsby intensificando dos nuevas especialidades: los retratos electro galanitos en cobre y el daguerrotipo en colores, labor acompañada del retratista inglés Mr. Glaskell. Con esto se esperaba mantener la reputación con la que gozaba hasta entonces, de “producir semejanzas de la vida”.


Aportes de inmigrantes europeos

A mediados del siglo XIX, crece en Europa el interés por fotografías de lo americano y exótico. Debido a su influencia, se instalan en el América los primeros estudios fotográficos, incentivados por el negocio del turismo, buscaban llevar de regreso testimonios en imágenes de estas tierras y sus habitantes.

Cuando se empiezan a consolidar las primeras repúblicas americanas, se impulsa la llegada de inmigrantes Europeos a América. Los territorios del sur-austral de Chile abrieron sus puertas a familias alemanas formadas por toda clase de profesionales y artesanos.

Aproximadamente en 1845 llegan los primeros fotógrafos extranjeros motivados por la aventura y el afán de lucro. Traían consigo avanzados equipos y conocimientos técnicos, y se interesaron por el retrato y el paisaje. Para los inmigrantes era fundamental compartir las nuevas experiencias con parientes y amigos.

Estos pioneros de la imagen en el sur del país no acogieron estética ni estilos de la pintura europea, como el realismo o el pictoralimso, si no más bien, se mostraron sensibles a lo que obrserbavan y quisieron dejar testimonio de ello.

Una de las familias más destacadas son los Valck, provenientes de Ausburgo, instalan en Chile una tradición fotográfica que traspasó generaciones por más de cien años.

________________________

Bibliografía

  • Memoriachilena.cl
  • Nuestro.cl
  • Luis Alberto Olguín Orellana, “la fotografía en Chile, retrospectiva y análisis publicitario”, Tesis Universidad de Stgo. de Chile, Escuela Tecnología, Depto. De Tecnologías Generales, 1993
  • Cristián Andrés Labarca Bravo, “Fotografía periodística chilena, los fotógrafos enjuician a los medios”, memoria para optar al título de periodista, USACH, Escuela de Periodismo, 1998
  • Gonzalo Leiva Quijada, “Álvaro Hoppe, El ojo en la historia”, Colección Imaginarios, 2003